Álvaro Alarcón, la esperanza
A los toros de El Pilar, de salida no hay que llevarles la contraria. Sus oleadas inerciales deben ser respetadas. Y cuando, poco a poco, se acoplan al torero que no se ha metido en su camino, regalan una fijeza enclasada sin parangón.
Por lo visto, eso no lo sabían los tres novilleros. Pero uno de ellos, Álvaro Alarcón, con valor, temple y pureza, terminó por educarlos. Merece la pena volver a verle. El resto de la novillada fue exitoso e intrascendente. Todos los novilleros cortaron orejas. El niño de las monjas salió a hombros y Miguel Perera también triunfó. Pero no me dijeron nada. Eso sí, como Álvaro Alarcón, estuvieron en novilleros, hambrientos de triunfo, jugándose el tipo. Y la gente se emocionó. No es poco.
José Carlos Arévalo.
Valencia:
Novillada Picada.
Entrada: Un cuarto de entrada.
Novillos de El Pilar, desiguales de presentación y comportamiento.
📍 EL NIÑO DE LAS MONJAS, oreja en ambos
📍 ALVARO ALARCON, oreja y vuelta al ruedo tras aviso.
📍 MANUEL PERERA, ovación y oreja.
